LA GRAN ERA DEL AMOR

sábado, 21 de abril de 2012

Mi vida en una maleta


Durante años nos vamos llenando de tantas cosas, tanto materiales como espirituales, porque creemos que eso nos llenará, que cuando nos damos cuenta tenemos los armarios llenos y nuestro corazón helado, porque aún así no hemos conseguido taponar ese hueco, ese vacío interior.

Ahora después del proceso de sanación y valorar las cosas que realmente valen, que el amor y la confianza en Dios no se meten en un armario, cuando ya sabes y sientes, entonces te das cuenta de que las cosas materiales ya no importan y esas caben en una maleta.

¡Alabado sea Dios!